Páginas del diario de Ana Franco en tiempos del coronavirus (X y final)

2 de julio

Casi todos los días informan por tv detenciones de personas por delitos económicos. Un reportaje desde Bayamo mostró la ocupación por la policía de tonelada y media de granos de café a unos delincuentes que utilizaban autos de turismo para su transporte y comercialización ilícita, se habían apropiado de los vehículos desde que se detuvo su renta para turistas y les habían puesto placas falsas. Este hecho evidencia manejos corruptos en esa agencia de renta de autos y falta de control sobre el sistema de acopio de café. En el municipio Céspedes, Camagüey, detectaron que una persona tenía un almacén con 4 toneladas de granos de maíz en sacos que dijo le había comprado a unos campesinos para revenderlos de forma ilícita y en Villa Clara apareció otro caso con varias toneladas de ajo almacenadas con el mismo fin. Han publicado otros casos de robo en entidades estatales y acaparamiento para la venta ilícita de medios de protección individual, artículos de ferretería y material escolar.

Casi a diario se muestran por televisión grabaciones caseras de artistas profesionales o aficionados recitando poemas, actuando, cantando o tocando música en solitario o en grupos. La imposibilidad de trasmitir sus actuaciones desde los estudios debido al confinamiento vigente por la epidemia, les ha permitido a muchos desconocidos por el gran público aparecer por primera vez en las pantallas.   

Igual que sucede todos los años cuando comienza la temporada ciclónica, en días pasados estuvimos varias horas sin electricidad en casa porque trabajadores de la Empresa Eléctrica estaban podando los árboles ubicados en los parterres, para evitar que sus ramas tropiecen con las líneas eléctricas. Como no podía ver la conferencia de prensa del Dr. Durán, pasé por  la farmacia y al verlo incluido en la lista de los medicamentos recién recibidos, hice una larga cola para comprar el que tomo diariamente para la hipertensión arterial.

Aunque Pompeo no quiera caldo ya le han dado no 3 como dice el refrán, sino 38 tazas, que es la cantidad de brigadas integradas por  más de 3400 médicos y enfermeras que han ido a otros países a prestar ayuda para combatir la epidemia de la COVID-19. En junio partieron 4 brigadas hacia Perú con 85 integrantes, otra de cerca de 300 médicos y enfermeras hacia Kuwait y cinco más pequeñas hacia Guinea Conakri, Guinea Bissau, Martinica, Islas Turcas y Caicos y Anguila, las tres últimas son territorios ultramarinos de Francia y el Reino Unido en el Caribe, respectivamente.

Fracasado el intento del Departamento de Estado en su obsesión por limitar los ingresos en divisas de Cuba con el pretexto de combatir el ¨tráfico¨ de supuestos esclavos, tres congresistas anticubanos promueven la aprobación de una ley para sancionar a los países que reciben nuestra asistencia médica, no importan los enfermos o muertos que pueda provocar a otros pueblos no contar con suficiente personal médico para enfrentar la pandemia.

Pasaron por televisión los dos sucesivos recibimientos realizados en el aeropuerto a los integrantes de las brigadas médicas que regresaron de luchar exitosamente con la pandemia en Lombardía y Andorra, en cada ocasión el Presidente les agradeció su labor en una trasmisión online observada a través de una pantalla grande. Posteriormente muchos pobladores de la zona salieron a recibirlos en balcones y aceras hasta el centro médico donde pasarán la cuarentena. Gran show televisivo, patriótico y emotivo. Quince días después se reuniría de nuevo con ellos para intercambiar experiencias y despedirlos antes de su salida hacia los territorios donde residen.

Las cadenas de tiendas confesaron su incapacidad para cumplimentar  el volumen de pedidos de alimentos y artículos de aseo que estaban recibiendo online.  Según informaron sus directivos, hasta que se creen condiciones para establecer el debido sistema de comercialización, después de realizar las entregas pendientes, solo realizarán ventas a precios de 10, 15, 20 y 25 CUC de bolsas conteniendo productos variados prefijados por la tienda. Estas ventas se rigen por el principio nada comercial de ¨todo o nada¨, que las hacen prohibitivas para las personas con insuficiente poder adquisitivo, las que estarían obligadas a desembolsar esos importes para recibir algunos productos que les resultan imprescindibles junto a otros que no lo son y les inmovilizarían su escaso dinero, esperando pacientemente a que el envío les llegue a casa.

Mientras en América crecen abruptamente los contagios y las muertes por la COVID-19, después de un ligero repunte a fines de mayo, se redujeron a niveles muy bajos los casos confirmados en nuestro país y gracias a una exitosa terapéutica se ha logrado evitar muchos fallecimientos a causa de la enfermedad. Atendiendo a la favorable situación epidémica, se dio a conocer por el Gobierno el plan para pasar a una nueva normalidad post COVID-19, que aunque elimina el férreo aislamiento social inicial, mantiene vigentes medidas de protección para evitar que el virus se vuelva endémico o que ocurran rebrotes.

Se definieron 3 fases de atenuación de medidas restrictivas, algunas provincias pueden estar en las fases  2 o 3 y otras en la fase 1.  El pase entre fases se decide centralmente según cinco indicadores preestablecidos de control de la pandemia. El grupo de trabajo del gobierno central  seguirá sesionando diariamente durante las 3 fases, controlando la situación y tomando las decisiones que resulten necesarias, hasta pasar a la completa normalidad.

La fase 1 del país se inició el 18 de junio para el municipio especial Isla de la Juventud y 12 provincias, el 23 para Matanzas. El 3 de julio  iniciarán la fase 1 para La Habana y la fase 2 para el resto de las provincias, excepto Matanzas que lo hará una semana después.

Simultáneamente en algunos territorios se realizan campañas intensivas de fumigación contra el mosquito Aedes Aegipti trasmisor del dengue, cuya presencia se ha ido incrementado por las frecuentes lluvias.

Felicité a Hipólito el vendedor ambulante de periódicos porque a pesar de todos los riesgos que corre yendo de un lado a otro en su labor, no se contagió con el virus. Que me perdonen los epidemiólogos, pero en este caso ha quedado probado, al contrario de la ingestión de un derivado del cloro que recomendó Trump,  que las bebidas alcohólicas son un buen antídoto contra la COVID-19. Hipólito ahora trae las manos más coloreadas porque ya están imprimiendo los periódicos a cuatro colores.

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